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Obrador vs Covid-19

Mi padre y Andrés Manuel López Obrador

Obrador vs Covid-19

Claudia Santillán

A Andrés Manuel López Obrador le tomó muchos años llegar al poder, años de recorrer de punta a punta la República Mexicana, para ganar votos y simpatías. Sin duda, hay que reconocerle ,es un buen conocedor de México, y casi tocando el poder en el 2006 terminó por enloquecer.

Teníamos a un personaje que portaba una banda presidencial que no era la oficial, pero que el reconocía como “legítima”, tomando la avenida más importante de el país, como lo es Reforma, para armar digamos su berrinche político. Algunos dicen que le fue arrebatada la Presidencia, otros dicen que no fue así, sin embargo un digno representante de un país no arma una rabieta de esa manera, se retira como los grandes, pero el no se retiró, su ira fue creciendo y creciendo conforme pasaron los años, de tal manera, que aún ya siendo Presidente por fin, la cólera lo siguió carcomiendo y ahora su fortaleza radica en dividir y polarizar. De ahí se engrandece, de eso se nutre y sus seguidores no lo ven., o lo ven y les gusta. Su sexenio empezó mal, al pasar por alto los delitos que el ex presidente Enrique Peña Nieto hubiera podido infringir, con el pretexto de su Ley de Amnistía, disfrazada de amor y de perdón, era el pretexto perfecto para no tocarlo pero sí para enfocarse en atacar a Felipe Calderón (que pensándolo bien quizá no es que lo odie, si no que le sirve para distraer la atención de lo que verdaderamente importa y apremia), me parece que ni el mismo ex presiden

te sospechaba que adquiriría una gran notoriedad por el odio incontrolable de Obrador hacia el. Y así, lejos de dedicarse a trabajar por el País, se dedicó a culpar, a hacer señalamientos contra los otros, los de el “pasado”, aquellos que gobernaron, los neoliberales, los conservadores. Ese mismo discurso que se ha encargado de repetir diariamente, porque así como cuando una canción que es espantosa llega a ser un hitazo tan solo por la repetición, así Obrador se encarga de mencionar diario las mismas palabras, para que al final de cuentas solo vaya sembrando odio y discordia entre los que le siguen y casi casi lo idolatran.

Todo su odio hasta hace unas semanas era dirigido hacia Calderón, y me parece que el propio Obrador fue el que sembró a su mas acérrimo rival mencionándolo todos los días, porque lejos de debilitarlo, lo engrandecía. Pero siempre he pensado: cuando las cosas no son para tí a la primera, no lo serán nunca y esto queda demostrado ahora cuando aparece un rival para Obrador mucho mas poderoso , más potente y mas fuerte que ningún : EL CORONAVIRUS. Jamás sin duda el ahora Presidente imaginó que tendría que enfrentarse a una pesadilla de esta magnitud, si bien quizá vio venir un temblor fuerte de nuevo , no era eso seguramente lo que le podría preocupar, de hecho el sabe bien como pedir ayuda y como robarla, o al menos nunca se supo en donde quedarían los fondos para ayudar a los damnificados, pero jamás pensó que una pandemia lo alcanzara.

El virus fue amenazador para el desde un principio, por lo que quiso desdeñarlo, minimizarlo, diciéndole a la gente que no pasaba nada, que todo era una mentira. Y es que el coronavirus poco a poco le robaba reflectores, se hablaba más de el virus que de el Presidente y para el, eso era letal, p

or lo que otra vez vio en el Covid a un adversario que políticamente lo podía derrocar, pero esta vez no hubo plantón que lo libere de el, esta vez no hay discurso, no hay otros culpables, el es el culpable de que las muertes estén sucediendo, porque esa gente que votó por el , confió , le creyó y se aventuró a salir sin las medidas precautorias, pues porque “.. si el presidente dice que no pasa nada, es que no pasa nada”.

El covid vino a desmantelar todo lo que le llevo años construir, su famosa cuarta transformación, que de transformadora no tiene nada, es decir, diría destructora. El covid ha venido a tirarle el teatro, en donde había puesto a un Secretario de Salud que ya no tenía la capacidad para accionar, y ha quedado demostrado. Integrando a un Subsecretario de Salud, dándole la palabra y el crédito porque el al principio quiso también hacerla de epidemiólogo, pero quizá llego un momento en que el mismo se dio cuenta de que no podía sostener tanto, y delegó al experto, dice el , que no es más que un tipo que es un extraordinario orador, con buen tono de voz , buena presentación y que ha acaparado reflectores porque la gente está ávida de que llegue un “doctor” a sus vidas para diagnosticarles, curarles , atenderlos y Gatell funge como esa figura protectora y nada más. Después resulta contagiada la Secretaria de la Función Pública, quien no salió a decir que tenia el COVID, cuando su puesto así lo ameritaba , y un sin fin de errores y de incompetencias que sólo el virus pudo revelar.

Sin duda ya la 4T se desmoronaba desde antes de la llegada del COVID, pero con la presencia de éste en el país, no hay más 4T. Tristemente para muchos que creyeron en el , todo fue un engaño y habrá quien siga creyéndole porque si algún talento tiene el presidente es que es un extraordinario orador, y manipulador de masas, tiene su sello muy personal y la gente lo identifica de inmediato, por supuesto que sigue siendo popular, pero , ojo, que no se entiende que el ser popular, es porque eres bueno en algo, hay asesinos que se vuelven populares, hay gente que comete atrocidades y se vuelve popular (ejemplo claro de las Ladies y los Lord´s que se han hecho virales en las redes), pero el Señor Presidente, cree que sigue siendo el mejor y lo mejor que le pudo pasar a México, pero ese es un aspecto demencial que , como psicóloga, les platicaré en otro articulo.

Sin duda jamás un virus será ganador, pero si Obrador le declaró la guerra, entonces ya sabemos aquí quien perdió.

 

Claudia Rivera

Twitter: @panaclo

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